Probablemente no nos damos cuenta, pero la decisión de empezar a ver una serie es una decisión importantísima, porque puede llevarnos a disfrutar o a desaprovechar un buen número de horas de nuestra vida. Es muy fácil empezar a ver una serie: te sientas delante de la televisión o del ordenador, le das al play…
Y ya estás atrapado, acabas de entrar en un mundo de ficción con sus personajes, sus tensiones, sus tramas, su estética… Es muy fácil empezar a ver una serie, sí, pero es muy difícil dejarlo. Porque una vez que te has identificado con los personajes, que los has visto evolucionar o seguir siendo siempre tercamente los mismos, ¿cómo vas a dejarlos a su suerte, dejar de interesarte por ellos, sabiendo que están teniendo nuevas aventuras de las que tú no sabes nada, nada, nada?
E incluso si la serie que te gusta empieza a decaer y degenerar, como Prison Break o Héroes, ¿cómo no pensar, como si fuéramos madres indulgentes, que sólo es una mala racha, que ya mejorará, que va a volver a ser la misma serie original y rompedora que nos atrapó al principio?
Empezar a ver una serie es suscribir un contrato, contraer una obligación. Hacerse esclavo de esa serie por un tiempo indeterminado y, en la mayoría de los casos, ilimitado.
¿Es una versión actualizada del relato del reloj de Cortázar?
Desde luego lo pensé mientras escribía la entrada. De hecho me planteé poner una última frase que dijera algo así como “cuando te regalan una serie, eres tú el regalado”, etc. Pero me pareció que estaba bien como está.
E incluso se puede dar el caso de series de las que eres esclavo por un tiempo y a las que, tras alcanzar la libertad, acabas por volver, al descubrir que las echas de menos.
A mi me sucedió con 24, de la que no vi la 3ª ni 4ª temporadas, pero a la que me reenganché en la 5ª, después de un merecido descanso 🙂
¿Sabeís? Estoy releyendo un clásico de la ciencia ficción “Cita con Rama” 😛
Me suena haberlo leído hace años, pero no me marcó demasiado, creo, porque casi no recuerdo nada… Igual me lo releo yo también, a ver…
tienes muchísima razón!
yo, últimamente, veo los nuevos capítulos de “house” en un blog.
no me importa que estén en versión original y con unos subtítulos incomprensibles..
es que no puedo esperar!!
Hace poco más de un año tuve la suerte de descubrir The Office (versión británica) y tras de disfrutar los 14 episodios producidos en un lapso de poco más de dos años me lamentaba que sus productores hubieran decidido no continuar la serie. Ahora, tras de una serie de decepciones (Heroes, Lost, Desperate Housewives, Grey’s Anatomy, Fringe) pienso que tal vez aquella decisión fue la correcta. Es mejor que los escritores de una serie planifiquen desde un inicio las premisas y metas del universo que están creando y un plazo aproximado para alcanzarlas y se apeguen a ellas. Solo aquellas series que no dependen fuertemente de la continuidad, como las CSI o las Law & Order suelen ser consistentes en la calidad de sus historias.
Las series británicas tienen cierta tradición de hacer temporadas cortas, y series de pocas temporadas, me da la impresión. Por ejemplo, Father Ted, la serie sobre unos peculiares curas irlandeses, sólo tuvo tres temporadas de pocos capítulos cada una. Es verdad que al final de la tercera se les murió el protagonista, pero de todas formas los directores ya habían declarado que no iban a hacer más temporadas. Lo mismo The IT Crowd, versión británica, que tiene temporadas muy cortas, y estuvieron pensándose incluso no filmar la tercera…
A veces da pena que series que tienen todavía potencial se terminen. Pero también es verdad que más vale morir con dignidad, que arrastrarse por el fango durante años a lo Los Serrano…
¡¡¡Lo confieso!!! ¡¡¡Estoy enganchadísimo a Lost!!! 🙂
4 8 15..Lost?..16 23..¿qué es Lost?..42
¿Quién vive en la sombra de la estatua?
Ah, no, que probablemente todavía no has llegado ahí…
Las últimas a las que me he enganchado yo son Six feet under (A dos metros bajo tierra) y The inbetweeners, además de, claro, la serie de moda esta temporada: Flashforward (que por cierto me da miedito esta última: el cuarto capítulo de la primera temporada ya me pareció de relleno…)
Y además, claro, sigo enganchado a House, Heroes, Mad Men, The Big Bang Theory… y Lost, que cuando vuelva en enero va a ser un fenómeno televisivo a nivel mundial…